En lo que ahora llamamos Dieselgeddon, el suministro de combustible diesel en los Estados Unidos se está desplomando. A fines de mayo o principios de junio, a menos que algo cambie drásticamente, el combustible diesel experimentará una escasez extrema y tendrá que racionarse en todo Estados Unidos.
Debido a que casi todos los trenes utilizan diésel (porque son trenes “diésel-eléctricos”), camiones de transporte, equipos de construcción y maquinaria agrícola, la caída en la disponibilidad de diésel afectará drásticamente a todo lo siguiente:
- Disponibilidad de comida
- Fertilizantes para el cultivo de alimentos.
- Carbón para alimentar la red eléctrica.
- Proyectos de construcción.
- Transporte de bienes de consumo a tiendas minoristas.
- UPS, Fedex, USPS y otros transportistas de paquetes.
Pocas personas se dan cuenta de lo importante que es el combustible diésel para la economía, pero están a punto de aprender esta importante lección por las malas: sin el combustible diésel, la economía estadounidense deja de funcionar. Punto final.
Sin diesel, UPS no puede entregar paquetes. Amazon.com cierra. El USPS deja de entregar correo.
Sin diésel, los trenes no pueden entregar fertilizantes a los agricultores. Los cultivos alimentarios no se plantan o no producen suficientes cosechas para alimentar al mundo.
Sin diesel, todos los proyectos de construcción se detienen, lo que significa que las carreteras y los puentes ya no se reparan. La infraestructura vial colapsa.
Sin diesel, los Estados Unidos de América dejan de funcionar.
Todo plantea la pregunta: ¿Por qué hay escasez de diésel?
Incendios misteriosos y conversiones a biodiésel de refinerías existentes
Una de las razones por las que no se refina suficiente diesel en Estados Unidos es porque en los últimos años, las principales refinerías de combustible cerraron sus operaciones de diesel y comenzaron a reestructurarse para producir “biodiesel”, un producto altamente ineficiente que señala virtudes que en realidad es horrible para el medio ambiente y, sin embargo, depende casi por completo de la producción de alimentos para hacer el combustible. (Es increíblemente derrochador cultivar alimentos y luego convertirlos en combustible. Solo mire el fiasco del etanol derivado del maíz que es una pesadilla ecológica…)
Como informó el JWN en 2020, “las refinerías de petróleo masivas se están convirtiendo en plantas de biocombustibles en el oeste”. Durante los bloqueos de COVID, resultó que había tanto exceso de diésel en la tubería que estas empresas se vieron obligadas a “volverse ecológicas” al transformar sus refinerías en fábricas de biocombustibles. Esto significa, por supuesto, que ya no pueden producir combustible diésel real a partir del petróleo. De esa historia:
Phillips 66 se convirtió el miércoles en la última de una serie de refinerías estadounidenses en decir que está convirtiendo una refinería de petróleo en California en una planta de biocombustibles a medida que la gasolina pierde su brillo ante los combustibles derivados de productos agrícolas y de desecho. La compañía dijo que su refinería Rodeo de 120,000 barriles por día cerca de San Francisco se convertirá en la planta más grande del mundo que produce el llamado diesel renovable, así como gasolina y combustible para aviones, a partir de aceite de cocina usado, grasas y aceites de soja.
El anuncio se produjo aproximadamente una semana después de que el gigante de los combustibles Marathon Petroleum Corp. dijera que podría convertir dos refinerías en plantas diésel renovables. En junio, HollyFrontier Corp. dijo que convertiría su refinería de Cheyenne, Wyoming, en una planta de diésel renovable para 2022.
Date cuenta de que, para producir biocombustibles a partir de los alimentos, alguien tiene que producir los alimentos primero. Y eso significa que los agricultores necesitan fertilizantes y combustible diésel para sus tractores a fin de cultivar los alimentos. Pero el diesel se está acabando precisamente porque las refinerías de diesel cambiaron a biocombustible, pero el biocombustible necesita alimentos que solo se pueden cultivar usando diesel. Es un círculo vicioso de fatalidad y estupidez. Pronto, Estados Unidos tendrá muchas refinerías inactivas que pueden producir biocombustibles a partir de alimentos, pero no tendrán ningún alimento para alimentar a sus refinerías.
No puedo compensar el nivel de estupidez requerido para llevarnos a este punto.
Además de esto, un misterioso incendio provocó una explosión masiva de una refinería de diésel en Filadelfia en 2019. La compañía que administra la refinería, Philadelphia Energy Solutions, se declaró en bancarrota en julio de 2019, luego del incendio y la explosión que acabó con ella.
Este tipo de incendio, que CNBC atribuye a una “tubería defectuosa”, nos recuerda la serie de incendios que afectaron a las instalaciones de alimentos en los EE. UU. en los últimos meses. Todo parece un sabotaje coordinado de la infraestructura que proporciona energía y alimentos a Estados Unidos.
En resumen, es la conversión a los llamados biocombustibles “verdes”, así como el misterioso incendio y explosión en Filadelfia, lo que ha llevado al DIESELGEDDON, que está a punto de golpear duramente a Estados Unidos. A medida que se acaba el diésel y el transporte se vuelve increíblemente caro y poco fiable, Joe Biden y los demócratas envían 40,000 millones de dólares a Ucrania mientras se niegan rotundamente a hacer algo para ayudar a defender la infraestructura energética de Estados Unidos.
Eso te muestra sus prioridades. Se trata de salvar a Ucrania mientras se destruye Estados Unidos.
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Y recuerda… “No asumas NADA, cuestiona TODO”.
Redacción Anwo.life