Un estudio de investigación publicado en el Journal of the American Psychoanalytic Association describe a la “blancura” (o sea, ser de raza “Blanco”) como una patología parasitaria que no tiene cura.

El artículo, titulado “Sobre la blancura“, fue escrito por el Dr. Donald Moss (que es blanco), miembro de la facultad tanto del Instituto Psicoanalítico de Nueva York como del Centro de Psicoanálisis de San Francisco.

Moss afirma que los blancos tienen una “particular susceptibilidad” a la condición “parasitaria”, que dice “hace que los apetitos de sus anfitriones sean voraces, insaciables y perversos” y los lleva a “aterrorizar” a los no blancos.

El académico chiflado enmarca la “blancura” como una enfermedad maligna que solo puede prevenirse mediante programas masivos de reeducación.

“El tratamiento eficaz consiste en una combinación de intervenciones psíquicas y sociohistóricas. Tales intervenciones pueden apuntar razonablemente sólo a remodelar los apetitos infiltrados de la blancura, a reducir su intensidad, redistribuir sus objetivos y, en ocasiones, convertir esos objetivos en el trabajo de reparación”, escribe.

Incluso entonces, Moss lamenta que “no hay garantía contra la regresión” y “aquí todavía no hay una cura permanente”.

Este tipo de retórica desquiciada también está siendo arrojada por los colegas docentes de Moss en escuelas y universidades de todo Estados Unidos bajo el disfraz de la teoría crítica de la raza.

El artículo subraya una vez más cómo la única forma de “racismo sistémico” y discriminación permitidos que existe en Occidente es contra los blancos.

Cuando literalmente todas las principales instituciones culturales, entidades gubernamentales, la industria del entretenimiento, la academia y los medios amplifican este tipo de tesis, la noción de “privilegio blanco” es ridícula.

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Y recuerda… “No asumas NADA, cuestiona TODO”.

Redacción Anwo.life