Nuestros estilos de vida están a punto de cambiar de manera importante, pero la gran mayoría de la población aún no entiende lo que se avecina. A lo largo de toda nuestra vida, siempre hemos podido depender de un par de cosas. Siempre habría gasolina barata para alimentar nuestros vehículos y siempre habría montañas de comida barata en el supermercado o mercados. Sin importar quién estuviera gobernando nuestros países y sin importar qué más sucediera en el mundo, esas dos cosas siempre permanecieron igual. Desafortunadamente, esos días ya terminaron y no volverán.
Hemos entrado en la mayor crisis energética que cualquiera de nosotros haya experimentado, y no va a desaparecer pronto.
Así que es mejor que te acostumbres a los altos precios de la gasolina. A principios de este mes, se establecieron nuevos máximos históricos en los Estados Unidos…
- Los Ángeles-Long Beach: $6,46 (récord máximo)
- Condado de Orange: $ 6.42 (récord más alto el sábado)
- Condado de Ventura – $6.40
- Condado de Riverside: $ 6.33 (récord más alto)
- Condado de San Bernardino $6.32
Pero ese no es el verdadero problema.
El verdadero problema es con el gas natural.
Gracias a la guerra en Ucrania, los suministros de gas natural en Europa se han vuelto extremadamente escasos y esto ha llevado los precios a la estratosfera.
No hace falta decir que esto afectará en gran medida la producción de alimentos en los próximos meses. Según Bloomberg, más de dos tercios de toda la capacidad de producción de fertilizantes en Europa ya se ha cerrado debido al aumento de los costos del gas natural.
La escasez de fertilizantes en Europa se está profundizando con más de dos tercios de la capacidad de producción paralizada por los altos costos del gas, lo que amenaza a los agricultores y consumidores mucho más allá de las fronteras de la región.
Esta es una historia absolutamente masiva, pero casi nadie en los Estados Unidos y América Latina la está cubriendo.
La producción mundial de fertilizantes se reducirá considerablemente, y eso tendrá implicaciones muy graves para la producción agrícola en todo el mundo.
Los cierres de plantas de nitrógeno en Europa no son simplemente un problema en Europa. La oferta reducida en la escala vista estas semanas no solo aumenta el costo marginal de producción de fertilizantes nitrogenados, sino que también restringirá el mercado global, ejerciendo presión sobre la disponibilidad de nutrientes para las plantas en Europa y más allá.
Ya estamos viendo que los precios en otros lugares aumentan nuevamente. El precio del fertilizante nitrogenado común, la urea, aumentó más del 20%, la mayor cantidad desde marzo, unas semanas después de que comenzara la guerra, según Green Markets.
Quizá los fertilizantes pueden no ser el tema más emocionante para muchas personas, pero la verdad es que aproximadamente la mitad de la población mundial moriría de hambre si no los tuviéramos.
De hecho, se estima que los fertilizantes nitrogenados ahora sustentan aproximadamente a la mitad de la población mundial. En otras palabras, se estima que Fritz Haber y Carl Bosch, los pioneros de este avance tecnológico, permitieron la vida de varios miles de millones de personas, que de otro modo habrían muerto prematuramente o nunca habrían nacido.
La única forma en que podemos acercarnos a alimentar a todos en el planeta es mediante el uso de grandes cantidades de fertilizantes, pero ahora las plantas de fertilizantes en toda Europa se ven obligadas a cerrar debido al precio del gas natural.
Mientras persista esta crisis energética mundial, también persistirá la crisis alimentaria mundial.
Rusia es normalmente el mayor exportador de gas natural en todo el mundo, y el fin de la guerra en Ucrania contribuiría en gran medida a resolver nuestros problemas actuales.
Pero no va a haber un final para la guerra en Ucrania.
Una vez más, los líderes occidentales nos aseguran que la guerra no terminará hasta que Rusia sea expulsada de cada centímetro del territorio ucraniano.
Eso incluye Donetsk, Luhansk y Crimea.
Por supuesto, los rusos usarían armas nucleares tácticas mucho antes de que lleguemos a ese punto.
Y una vez que los rusos usen armas nucleares tácticas, Occidente hará lo mismo.
Tal como está actualmente, no hay una «rampa de salida» para esta guerra.
En cambio, simplemente estamos contando los días hasta que se vuelva nuclear.
Si la sociedad realmente entendiera lo que está en juego, habría protestas masivas por la paz en todo el mundo ahora mismo.
Mientras tanto, la peor megasequía multianual en 1,200 años continúa devastando absolutamente la producción agrícola en la mitad occidental de los Estados Unidos.
Un reportero de FOX visitó recientemente los campos de maíz del condado de Wayne, Nebraska y lo que descubrió es sumamente escalofriante…
“Estoy parado en medio de un campo de maíz que, si este fuera un año normal o, en otras palabras, si el maíz estuviera creciendo de la forma en que se suponía que debía ser, ni siquiera serías capaz de verme en este momento”, informó Connell McShane de FOX Business desde Wakefield, Nebraska. “Estaría muy por encima de mi cabeza. Pero ahora miro esto, tal vez hasta la rodilla en el mejor de los casos”.
McShane visitó campo tras campo en el condado de Wayne y encontró los mismos tallos cortos con mazorcas muy escasas. Más del 99% de ese condado se encuentra en sequía excepcional.
Esta sequía ha estado ocurriendo durante años y años.
Y sigue empeorando.
En la costa oeste, nos advierten que la producción de tomates, ajos y cebollas será muy decepcionante este año debido a la sequía.
Como resultado, los precios van a subir mucho más en 2023.
Además de los tomates, también se espera que otros cultivos como el ajo y la cebolla se vean afectados.
“Lo que está viendo cosechado este verano que realmente ni siquiera ha llegado a los estantes de los supermercados es un aumento del 25 % en el costo del producto para los procesadores, los enlatadores, los compradores”, dijo el presidente de la Junta de Alimentos y Agricultura del Estado de California. Don Cameron dijo a Reuters. “La cebolla y el ajo ya se han negociado para 2023 con otro 25% más de precio”.
Esto realmente está sucediendo.
Los precios de la comida te pueden parecer altos ahora mismo, pero la verdad es que es lo más bajo que van a conseguir.
El costo de vida se está volviendo extremadamente opresivo, e innumerables personas están realmente luchando para sobrevivir mes a mes.
Lamentablemente, lo que hemos pasado hasta ahora es solo el comienzo.
El costo de la gasolina va a seguir subiendo.
El costo del gas natural va a seguir subiendo.
El costo de los alimentos va a seguir subiendo.
De hecho, el costo de casi todo seguirá aumentando.
Los estilos de vida inflados artificialmente que pudimos disfrutar durante décadas ahora están desapareciendo y hay una enorme cantidad de dolor en el horizonte.
Nos advirtieron que esto sucedería, y ahora ha llegado el día.
*Michale Snyder
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Y recuerda… «No asumas NADA, cuestiona TODO».
Redacción Anwo.life