Un estudio publicado en la revista Temperature ha afirmado que existe una correlación entre el aumento de las temperaturas y el aumento de la obesidad y la mala salud de los niños.

El estudio afirma que el cambio climático está provocando que más niños permanezcan en casa, coman más y, en general, sean menos activos.

CBS Mornings cubrió los “hallazgos” el fin de semana pasado, y señaló que casi un tercio de los niños están menos en forma que hace una generación.

También señala que menos niños realizan actividad física durante 60 minutos al día.

El argumento central del estudio se refiere a la “evaluación del estrés por calor” y afirma que es más “peligroso” y menos divertido para los niños estar activos si hace más calor afuera.

Los críticos han notado que el estudio usa estadísticas registradas durante los bloqueos de COVID y, como tal, puede estar sesgado.

Señala que “el cambio climático no solo ejercerá efectos directos como temperaturas ambientales más altas en muchas regiones, sino que también será responsable de los efectos indirectos que pueden afectar de forma independiente los hábitos de actividad física de los niños, por ejemplo, como se observó durante la pandemia global de Covid-19″.

Quizás el hecho de que los niños se vuelvan obesos y poco saludables tenga más que ver con el hecho de que sus padres les dan cada vez más alimentos poco saludables (más asequibles), sumado al hecho de que la sociedad alienta, protege e incluso celebra estilos de vida poco saludables.

Este punto fue ampliado recientemente por Bill Maher, quien señaló que “¡Es orwelliano la frecuencia con la que se usa la positividad para describir lo que no es saludable!”

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Y recuerda… “No asumas NADA, cuestiona TODO”.

Redacción Anwo.life