YouTube ha insistido en que mantener su plataforma abierta a una diversidad de ideas es crucial para la libertad de expresión, pero la subsidiaria de Google ha decidido que las críticas a las vacunas COVID deben ser censuradas, considerándolas como «desinformación» que representa un peligro para el público.
La compañía está prohibiendo a destacados activistas contra las vacunas y bloqueando prácticamente todo el contenido contra las vacunas, informó el Washington Post.
Los canales de video asociados con Joseph Mercola y Robert F. Kennedy Jr. se encuentran entre los objetivos, dijo el documento, y señaló que «los expertos dicen que» los dos «son parcialmente responsables de ayudar a sembrar el escepticismo que ha contribuido a reducir las tasas de vacunación en todo el país».
En julio, el presidente Biden instó a las empresas de redes sociales a abordar la propagación de «información errónea» sobre las vacunas experimentales COVID-19.
Matt Halprin, vicepresidente de confianza y seguridad global de YouTube, aclaró que la prohibición del contenido antivacunas va más allá de las vacunas COVID y cubre cualquier vacuna.
Mercola y Kennedy han dicho que no están en contra de todas las vacunas, pero han sostenido que se está suprimiendo la información sobre los riesgos de las vacunas.
Halprin le dijo al Post que la política de YouTube aún permitirá a las personas hacer afirmaciones basadas en su propia experiencia personal. Y también se permitirá la discusión científica sobre las vacunas y sus fracasos o éxitos históricos, dijo.
Pero el portavoz de YouTube dijo que la plataforma «eliminará las afirmaciones de que las vacunas son peligrosas o causan muchos efectos en la salud, que las vacunas causan autismo, cáncer, infertilidad o contienen microchips».
La base de datos de informes de eventos adversos de vacunas de los Centros para el Control de Enfermedades, conocida como VAERS, al 17 de septiembre tiene 15,386 muertes por vacuna COVID reportadas, 66,642 hospitalizaciones y 726,963 eventos adversos. VAERS es un sistema de notificación voluntaria que se ha estimado que representa solo el 1% de las lesiones causadas por vacunas.
«Al menos cientos» de moderadores de YouTube han sido asignados para trabajar en información médica errónea, dijo.
El grupo republicano Never-Trump, el Proyecto Lincoln, reaccionó favorablemente en Twitter a la prohibición, en una palabra: «Bien».
Sin embargo, Renee Hoenderkamp, una médica británica que colabora con BBC Radio London, destacó un problema importante con la política de YouTube.
«La pregunta es ¿quién decide qué es desinformación?»
Vivek Ramaswamy, fundador y presidente ejecutivo de la compañía biofarmacéutica Roivant Sciences, predice que la política será contraproducente, argumentando que «la censura genera desconfianza».
«Recuerde el año pasado cuando Big Tech censuró la hipótesis de fuga de laboratorio», dijo sobre el origen de la pandemia. «El público no tiene ninguna razón para confiar en su arbitraje de la verdad».
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Y recuerda… «No asumas NADA, cuestiona TODO».
Redacción Anwo.life