¿Por qué algunos sectores insisten en vacunar a más personas a pesar de que la pandemia del COVID-19 se ha esfumado? Simple. Quieren perpetuar la narrativa de que las vacunas son necesarias para la seguridad individual y la inmunidad global.
No importa que estas vacunas de ARNm sean experimentales por naturaleza, y muchas, incluidos los refuerzos bivalentes, ni siquiera se han sometido a ensayos en humanos y, sin embargo, están aprobadas por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA).
En Canadá, por ejemplo, el abogado Keith Wilson descubrió dos hechos vitales contra los mandatos prolongados de COVID: primero, la Dra. Liza Waddel, una alta funcionaria de salud en Canadá, recomendó en contra de la vacunación forzada para viajar en Canadá. En segundo lugar, la Dra. Celia Lourenco, directora general de Health Canada, dijo durante un contrainterrogatorio que se omitieron los ensayos adecuados en humanos para las inyecciones de COVID y que en este momento se está realizando un ensayo real en humanos en Canadá.
“Fue muy importante para nosotros confirmar que este es un gran experimento que se está llevando a cabo”, dijo Wilson.
Claramente, hubo colusión y engaño aquí, con la Big Pharma, agencias gubernamentales de salud, los principales medios de comunicación y las élites como los principales actores y humanos como conejillos de indias o víctimas inocentes.
Las pruebas contra las inyecciones de COVID son conspicuas y, sin embargo, la mayoría de la población mundial ha sido atraída, o más acertadamente, engañada para aceptar las vacunas COVID-19 como una manera fácil de mantenerse saludable.
Hace una década, las compañías farmacéuticas debían probar exhaustivamente en humanos los nuevos medicamentos y vacunas antes de que los legisladores les otorgaran permiso para venderlos y distribuirlos en el mercado abierto.
En un momento dado, miles de personas participaron en ensayos clínicos de medicamentos, según datos del sitio web ClinicalTrials.gov de la Biblioteca Nacional de Medicina. En ese entonces se les informó a fondo de lo que se les dará, por lo que tuvieron que pasar y las posibles repercusiones.
Ahora, estos ya no son ciertos.
No importa que durante los ensayos las vacunas no se probaron en humanos sino en ratones. No importa también que el período de prueba cubriera solo unos pocos meses y no años, como debería haber sido el caso.
Dr. Ben Marble: Hacer una vacuna en nueve meses es muy dudoso
Según el Dr. Ben Marble, nominado al Premio Nobel y fundador de la aplicación de telesalud MyFreeDoctor, un medicamento “nunca debe recetarse a los pacientes hasta que haya estado en el mercado durante al menos tres años porque es cuando la gente descubre si realmente es peligroso o no”.
Marble dijo que la Big Pharma nunca había fabricado una vacuna en menos de cuatro años, por lo que es muy dudoso fabricar una vacuna en nueve meses.
Bueno, por supuesto, se realizaron algunos ensayos clínicos legítimos, especialmente antes de que se lanzaran los primeros lotes de vacunas para combatir el COVID. Sin embargo, lo que es molesto es que la Big Pharma, en connivencia con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), más tarde trató de ocultar los datos, particularmente sobre los efectos adversos de la vacuna en las personas.
Por otro lado, se descubrió que los investigadores permitieron que los miembros del grupo de control recibieran la inyección de ARNm mucho antes de que terminaran los períodos de estudio, lo que comprometió los resultados por completo.
Big Pharma probó una nueva táctica este año con el consentimiento de las agencias de salud y el apoyo de los principales medios de comunicación. Están promoviendo otro impulso global para inyectar a tantas personas como sea posible con las vacunas COVID lanzadas apresuradamente a pesar de que más de cinco mil millones ya han recibido al menos una dosis.
La única explicación plausible detrás del impulso es que la Big Pharma recaude más miles de millones a medida que la demanda de vacunas se desploma y el factor miedo COVID desaparece.
Para no ser acusados de estar en connivencia con la Big Pharma, algunos funcionarios del gobierno admitieron a regañadientes que la campaña de vacunación intensificada es un experimento humano masivo disfrazado. Una mera continuación de los experimentos originales donde los humanos son parte y sujeto de los ensayos clínicos de medicamentos.
Y estos se están llevando a cabo en todo el mundo. Para Marble, un gran experimento es incluso un eufemismo.
“Ya hemos sido testigos del mayor envenenamiento masivo en la historia de la humanidad. Nunca ha habido un momento en el que cinco mil millones de personas hayan tomado arsénico o cinco mil millones de personas hayan tomado cianuro, pero acabamos de presenciar el mayor envenenamiento masivo de la historia”, dijo Marble durante el episodio del 9 de noviembre de “The Dr. Ardis Show” en Brighteon.TV.
Y lo aterrador es que sus defensores no quieren parar hasta que completen la aniquilación de la humanidad.
Mire el video a continuación que explica por qué la vacuna COVID-19 es un experimento humano.
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Y recuerda… «No asumas NADA, cuestiona TODO».
Redacción Anwo.life