La granada (Punica granatum) es una fuente inagotable de nutrientes rica en antioxidantes, fibra dietética, vitamina C y taninos beneficiosos. La fruta a menudo ha sido objeto de diversos estudios porque ofrece beneficios para la salud cardiovascular.

Un estudio reciente también ha encontrado que la granada tiene increíbles actividades anticancerígenas.

¿Qué son las granadas?

Las granadas son frutos rojos redondos con una pulpa interior blanca llena de arilos o semillas comestibles crujientes y jugosas.

Las granadas son bajas en calorías y grasas, pero están llenas de fibra dietética, vitaminas y minerales. También contienen algo de proteína.

Una granada de tamaño medio (282 gramos) contiene los siguientes nutrientes:

• Calorías (234)
• Proteína (4,7 gramos)
• Grasa (3,3 gramos)
• Carbohidratos (52 gramos)
• Azúcar (38,6 gramos)
• Fibra dietética (11,3 gramos)
• Calcio (28,2 mg o 2 por ciento del valor diario (DV))
• Hierro (0.85 mg o 5 por ciento del DV)
• Magnesio (33,8 mg u 8 por ciento del DV)
• Fósforo (102 mg u 8 por ciento del DV)
• Potasio (666 mg, o 13 por ciento del DV)
• Vitamina C (28,8 mg o 32 por ciento del DV)
• Folato o vitamina B9 (107 mcg, o 27 por ciento del DV)

El jugo de granada ralentiza significativamente el crecimiento de células de cáncer de próstata

En el estudio, los investigadores encontraron que el jugo de granada tenía efectos increíbles para retrasar el desarrollo del cáncer de próstata. Además, la granada puede ayudar a tratar y prevenir el cáncer de mama y de colon.

El cáncer de próstata es el cáncer más comúnmente diagnosticado en los hombres y representa el 29 por ciento de todos los cánceres masculinos. La Sociedad Estadounidense del Cáncer informa que el cáncer de próstata es la segunda causa principal de muertes relacionadas con el cáncer en los EE. UU.

Los médicos evalúan el estado de la enfermedad midiendo cuánto tardan en duplicarse los niveles de andrógenos específicos de la próstata (PSA).

En un estudio publicado en la revista Clinical Cancer Research, los hombres con índices crecientes de PSA recibieron ocho onzas de jugo de granada al día.

Según los resultados, se tardó más en duplicar las tasas medias de PSA. De hecho, el tiempo aumentó de 15 meses al inicio a 54 meses después del tratamiento.

Los voluntarios también experimentaron una disminución del 12 por ciento en la proliferación celular y un aumento del 17 por ciento en la apoptosis o muerte de las células cancerosas. Los investigadores encontraron prometedora la “prolongación estadísticamente significativa del tiempo de duplicación del PSA” y creen que estudios adicionales pueden ayudarlos a aprender más sobre los beneficios para la salud de las granadas.

La granada frena el crecimiento del cáncer de mama y tumores intestinales

Según estudios en animales, la granada tiene efectos protectores contra el cáncer de mama inducido químicamente. Los resultados mostraron que cuando se administró antes y después de la exposición, el extracto de granada redujo la incidencia, el número y el tamaño de los tumores de mama.

En un estudio publicado en la revista Nutrition and Cancer, los investigadores observaron una “sorprendente reducción de la incidencia de tumores mamarios y la carga tumoral total”. Agregaron que, con más estudios, la granada podría desarrollarse como un fármaco para reducir el riesgo de cáncer de mama.

Las enfermedades intestinales como la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa pueden aumentar significativamente el riesgo de cánceres intestinales. Pero según los estudios, los animales con colitis inducida experimentalmente tratados con ácido elágico mostraron una progresión inhibida de la colitis.

Los investigadores también observaron un “apagado” de las moléculas de señalización que, de lo contrario, se activarían y promoverían el cáncer.

Los datos también sugieren que el consumo de granada ayudó a mejorar las tasas de supervivencia en animales con cáncer de colon.

La granada se dirige a las células cancerosas con múltiples métodos de acción

Se ha demostrado que tres polifenoles de granada, a saber, luteolina, ácido elágico y ácido punícico, previenen la metástasis. Estos polifenoles también ayudaron a retrasar el desarrollo de tumores e inhibieron la propagación y progresión del cáncer de próstata en animales inyectados con células tumorales humanas.

Dos polifenoles en la granada, el ácido elágico y la punicalagina, pueden ayudar a prevenir el daño del ADN. Esto es importante porque las mutaciones en los genes están relacionadas con el cáncer.

Los datos también sugieren que el extracto de granada puede ayudar a interferir con los ciclos anormales de proliferación celular para prevenir la proliferación descontrolada que caracteriza al cáncer. El extracto también ayuda a combatir la inflamación al atacar las moléculas proinflamatorias.

La investigación también muestra que los extractos de granada detienen la formación de tumores al causar apoptosis. También inhiben la angiogénesis o la formación de nuevos vasos sanguíneos para nutrir el tumor.

Los extractos también pueden ayudar a detener la metástasis o la invasión de tejido sano al sofocar la producción de enzimas que “funden proteínas” y moléculas de señalización que hacen que el cáncer sea invasivo.

Por último, el extracto de granada puede ayudar a retrasar el crecimiento de muchos cánceres dependientes de hormonas.

Incorporar la granada a una dieta saludable

Hay muchas maneras de agregar granada a una dieta balanceada para prevenir el cáncer y mejorar su bienestar general.

Si bien no existe una dosis establecida para el extracto de granada, algunos herbolarios y médicos integrales recomiendan cantidades que van desde los 50 ml hasta los 240 ml al día. Tenga en cuenta que la granada puede interactuar con algunos medicamentos, así que consulte con un profesional naturópata de confianza antes de complementar con jugo o extracto de granada.

Siga una dieta balanceada y coma frutas nutritivas como las granadas para mejorar su salud en general.

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Y recuerda… “No asumas NADA, cuestiona TODO”.

Redacción Anwo.life