Como muchos de ustedes sabrán, la humanidad está bajo un ataque de guerra psicológica masiva y el profesor de Psiquiatría Clínica, Matthias Desmet, que ha estudiado la psicología del totalitarismo, ha hecho un excelente trabajo al explicar cómo llegamos aquí y cómo es que ganamos.
En las dictaduras, la obediencia proviene de un miedo básico al dictador. Pero con el totalitarismo, la gente está hipnotizada para que obedezca. En términos psicológicos, esta hipnosis masiva se conoce como formación masiva.
Y el totalitarismo siempre comienza con una formación masiva dentro de la población.
Una formación de masa requiere 4 condiciones para que se arraigue:
1) Las masas deben sentirse solas y aisladas.
2) Sus vidas deben sentirse inútiles y sin sentido.
Estas condiciones han ido creciendo durante años con las redes sociales, es decir, narcisismo, sociopatía, adicción y enfermedad mental.
3) Las masas deben experimentar una constante ansiedad flotante.
4) Deben experimentar frustración y agresión flotantes.
Esto simplemente significa que no hay una fuente discernible para la ansiedad o la agresión. Y así, la persona comienza a desear irracionalmente un remedio, por absurdo o destructivo que sea.
Y estas condiciones se cumplieron en 2020, con los cierres de COVID y los disturbios de BLM.
Ahora están listos para la hipnosis.
Y una vez que aceptan los golpes experimentales, se sienten solidarios, lo que valida todo para ellos, sin importar cuán absurdo sea. Ahora han cambiado, ya no son racionales. Se vuelven intolerantes y crueles.
Entonces, ¿Cómo Ganamos?
Los estudios han demostrado que alrededor del 25% de la población no puede ser hipnotizada. Y alrededor del 10% son muy susceptibles a la hipnosis.
El profesor Desmet nos simplifica aún más esto. Él dice que el 30% de las personas ahora están profundamente hipnotizadas y han aceptado irracionalmente las inyecciones experimentales como su solución. El 40% aún no está hipnotizado, pero en última instancia se unirá a la manada.
Y el resto de nosotros estamos viendo las cosas con claridad.
Lo que el enemigo está tratando de hacer es extremadamente peligroso, porque si las masas alguna vez se despiertan de su hechizo, exigirán justicia y, por lo tanto, se debe mantener una presión constante sobre las masas hasta que se complete la “formación de masas”.
Somos la voz de la disidencia. Y aunque es posible que no tengamos mucha influencia sobre el 30% hipnotizado, definitivamente debemos dominar al 40% que estará de acuerdo con la manada.
Necesitamos convertirnos en la manada.
Si cree que todo esto sucedió por accidente o conspiración; ya sea que sus razones se basen en la religión o en la salud personal, nuestra voz de disensión debe convertirse en una, debe crecer y nunca debe cesar.
Debemos esparcir las semillas de la duda a todos: en la gasolinera, en el colmado, en el trabajo, con los vecinos.
Están tratando desesperadamente de provocar una guerra civil o una revolución violenta, porque pueden controlar eso.
La violencia no sacará a la gente de la hipnosis, solo empujará a más gente a ella.
Decir la verdad se ha convertido en un acto revolucionario. Decir la verdad a todos los que conozcas salvará a la humanidad, así que sigamos haciéndolo.
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Y recuerda… “No asumas NADA, cuestiona TODO”.
Redacción Anwo.life