Sin duda, vivimos en un mundo de grandes contradicciones, y hablando de “progreso”, estamos seguros que la tecnología no tiene nada que ver con éste en realidad.
Si te perdiste la primera parte, te dejamos el link a continuación:
Siendo sinceros, en el fondo, la tecnología y la ciencia no nos han aportado ningún progreso sustancial y profundo, porque como hemos dicho, nuestras dependencias iniciales siguen permaneciendo intactas.
Hablemos pues… del “fundamentalismo científico-tecnológico”.
Así pues, ahora mucha gente interpretará erróneamente que estamos criticando el avance científico y tecnológico, arrastrados por esta nueva corriente que todo lo inunda y que podríamos calificar como fundamentalismo científico-tecnológico, una especie de fanatismo basado en la adoración ciega al avance tecnológico y científico más allá de las consecuencias finales que éste implique.
Y es que este tipo de personas responden automáticamente, como si alguien accionara un resorte en su interior, es decir, cuando alguien pone en duda el uso que hacemos de la ciencia o la tecnología, empiezan a hablar atropelladamente de grandes avances en medicina, lucha contra las enfermedades, aumento de la esperanza de vida, avances tecnológicos en forma de toda suerte de vehículos, viajes a la luna y exploración espacial.
Y una vez centrado el marco de discusión donde a ellos les interesa, es decir, en los aspectos más superficiales y aparentes de estos avances, acusan a sus interlocutores poco menos que de “retrógrados que pretenden volver a vivir en cuevas o en los tiempos de la peste negra”.
Una respuesta tan ridícula como si, a alguien que osara criticar al gobierno o a las estructuras del poder, le respondieran que “pretende instaurar el caos y que es amante del crimen y el salvajismo”. La suya pues, es una posición, en cierto grado, extremista.
Y es que, por lo visto, en su visión distorsionada de la realidad, la humanidad debe estar forzosamente al servicio de los instrumentos que crea y no al revés. Para ellos, todo descubrimiento o avance es como un nuevo territorio que debe ser colonizado por obligación, sí o sí, aunque se trate de una tierra estéril y repleta de residuos tóxicos y alimañas venenosas.
En sus manos el avance científico y tecnológico se ha convertido en un sinsentido, en un servilismo ciego a la herramienta por el simple hecho de que ésta existe, sin que importe la función original para la que fue creada. Dice el proverbio que “cuando el sabio señala la luna, el necio mira su dedo”. Pues en su caso, confundir la tecnología con el progreso viene a ser como mirar el dedo. Eso explica cómo y por qué hemos llegado a la situación en la que estamos.
Así pues, lo que deberían comprender estos fundamentalistas tecnológicos es que cuando afirmamos que la tecnología no ha servido para generar un progreso real, en ningún caso pretendemos criticar a la tecnología o al avance científico en sí, porque hacerlo sería caer en el absurdo. Sería tan ridículo como criticar la existencia de los telescopios, los sartenes o los violines. O como criticar la fisión nuclear, la electrolisis o la mecánica cuántica.
Los avances tecnológicos y científicos solo son meros instrumentos, y como tales pueden ser utilizados de una u otra manera dependiendo de quién y cómo los utilice. Por lo tanto, no son ni “buenos” ni “malos”. ¿Una sierra mecánica es algo malo? No. Es una herramienta muy bien ideada. Pero en manos de un loco puede hacer mucho daño. Eso es a lo que nos referimos, a que no hemos sabido utilizar adecuadamente estos maravillosos avances y que por nuestra propia culpa, no han generado un progreso real, sino un conjunto de nuevas dependencias y esclavitudes a nivel vital, encarnadas en una complejidad cada vez más inasumible.
Pero eso no es lo peor; lo más grave es que los extraordinarios avances que estamos realizando, nos están conduciendo, irremisiblemente, al momento más peligroso de la historia de la humanidad, es decir, a un punto sin retorno.
De esta manera, cuando afirmamos que el momento que la humanidad está viviendo es crítico y que nuestras propias creaciones ponen en peligro nuestra esencia como seres humanos, salen de nuevo al asalto las hordas programadas por el Sistema. Su respuesta, al unísono, como una brigada de loros entrenados, es invariablemente la misma: “¡Este punto de vista es absurdo! ¡Son ustedes unos retrógrados! ¡Tienes miedo al progreso!”. Y acostumbran a culminar tales afirmaciones con su “sabia visión” de la evolución humana. Cosas como… “La revolución tecnológica que vivimos ahora es análoga a la revolución industrial. La historia se compone de ciclos que se repiten y no vivimos, ni un punto culminante, ni un punto sin retorno, sino solo una etapa más de nuestra evolución constante, como tantas otras hasta ahora”.
Y en parte tienen razón. Los ciclos se repiten a lo largo de la historia. Pero desgraciadamente, cuando tienes la mente plana, lo ves todo en dos dimensiones. Y ese es el problema que tienen los fundamentalistas tecnológicos. Son incapaces de ver la tercera dimensión a pesar de que cuentan con aparatos para ello.
Efectivamente se producen ciclos repetitivos a nivel social, político y económico, pero hay un elemento que no sigue ningún ciclo repetitivo, sino una línea ascendente que lo cambia absolutamente todo: la evolución tecnológica y científica.
Así pues, la evolución de las sociedades humanas no se compone de círculos sobre un papel plano que van repitiéndose sin cesar. Es más parecida a una escalera de caracol, en la que el eje vertical corresponde a las transformaciones tecnológicas y científicas. Y como todos sabemos, las escaleras sirven para cambiar nuestra posición y llevarnos a nuevas alturas, inimaginables para alguien con una mente bidimensional. Por eso afirmamos que el momento que está viviendo ahora mismo la humanidad no tiene comparación y que no existen referentes pasados aplicables a lo que se avecina.
Hacer previsiones basándose en situaciones del pasado, en este caso, es erróneo. Porque, además, para añadir aún más dificultad a la hora de hacer previsiones, resulta que esta escalera por la que estamos subiendo no tiene todos los peldaños iguales. La altura de los peldaños crece exponencialmente a medida que vamos subiendo por ella y no podemos saber con seguridad cuál será el tamaño del siguiente peldaño. Cada escalón que ahora sube la humanidad es como mil escalones anteriores y la proporción varía a cada escalón, porque la velocidad a la que se producen nuevos descubrimientos científicos y nuevos avances tecnológicos es cada vez mayor. Por lo tanto, que nadie se deje engañar por las voces anestesiastes que nos susurran al oído que “todo va bien y que ya hemos recorrido este camino con anterioridad”.
La humanidad está andando una senda inexplorada y estamos entrando en un territorio en el que cada paso que damos exige una responsabilidad mucho mayor porque las consecuencias de cada paso dado en falso son incalculables. Y esta es una responsabilidad compartida por todos y cada uno de nosotros, que nadie, con un mínimo de conciencia, debería eludir.
*Si te gusta esta información y te ha sido de utilidad, ayúdanos a difundirla para que más personas tengan la oportunidad de conocerla
Y recuerda… «No asumas NADA, cuestiona TODO».
Redacción Anwo.life
Compartir:
“AYÚDANOS A MANTENER ESTA INFORMACIÓN DISPONIBLE PARA TI Y MILES DE PERSONAS MÁS”.
Tu donativo contribuirá para difundir la verdad, derrotar la mentira y mejorar la toma de decisiones en contra del Nuevo Orden Mundial.
En Italia, la pasta es un asunto serio y fundamental en la vida diaria. Por lo tanto, no es sorprendente que los precios disparados de los espaguetis, fettuccinis, bucatinis y otros favoritos hayan causado pánico en Italia. Una inminente crisis de la pasta ha asustado tanto a los italianos que el gobierno ha convocado reuniones especiales para abordar el aumento de precios. Incluso los consumidores italianos enojados han llamado a una «huelga de pasta» para protestar contra los precios en aumento.
Los rusos se interesaron de inmediato en el escándalo de la filtración de inteligencia en los EE. UU. porque muchos de los documentos tratan sobre la preparación de sus propias fuerzas militares y las ucranianas para el tan esperado “contraataque” de Kiev que puede ser decisivo en el resultado de la guerra.
“AYÚDANOS A MANTENER ESTA INFORMACIÓN DISPONIBLE PARA TI Y MILES DE PERSONAS MÁS”.
Tu donativo contribuirá para difundir la verdad, derrotar la mentira y mejorar la toma de decisiones en contra del Nuevo Orden Mundial.
Anuncio publicitario
Lo más reciente
Please disable your adblocker or whitelist this site!
error: ¡ El contenido esta protegido !
Usamos cookies para asegurar que te damos la mejor experiencia en nuestra web. Si continúas usando este sitio, asumiremos que estás de acuerdo con ello.Aceptar