“Si hay cosas de las que necesita abastecerse, debe hacerlo de inmediato”. Esta es la alerta lanzada varios analistas económicos en los Estados Unidos.

Durante semanas, se ha estado informando sobre la inflación galopante de la que está siendo víctima Estados Unidos. De acuerdo a los expertos, no se ha visto nada como esto desde la era de Jimmy Carter en la década de 1970, y muchos advierten que va a empeorar aún más en los meses venideros. Eso significa que los precios nunca serán más bajos que en este momento. Aún más importante, también se advierte que la escasez generalizada en la economía norteamericana está a punto de empeorar. De hecho, la empacadora de carne más grande del mundo acaba de ser golpeada por un ciberataque, y esto la ha obligado a detener la actividad “en sus plantas en varios estados de EE. UU.

La Casa Blanca dijo el martes que JBS SA de Brasil informó al gobierno de Estados Unidos que un ataque de ransomware contra la compañía que interrumpió la producción de carne en América del Norte y Australia se originó en una organización criminal probablemente con sede en Rusia.

JBS es la empacadora de carne más grande del mundo y el incidente provocó el cierre de sus operaciones en Australia el lunes y detuvo la matanza de ganado en sus plantas en varios estados de EE.UU.

Es posible que muchos de ustedes no estén familiarizados con JBS, pero esto es muy importante. Según Bloomberg, «una quinta parte de la producción de Estados Unidos» desaparecerá mientras estas plantas estén inactivas.

“Las cinco plantas de carne de res más grandes de JBS en los EE. UU., que en total manejan 22,500 cabezas de ganado por día, detuvieron el procesamiento luego de un ataque de fin de semana a las redes informáticas de la compañía, según publicaciones de JBS en Facebook, sindicatos y empleados. Solo esos cortes han acabado con casi una quinta parte de la producción estadounidense. Las operaciones de matanza en Australia también disminuyeron, según un grupo comercial. Una de las plantas de carne de res más grandes de Canadá estuvo inactiva por segundo día consecutivo”.

Hasta que pase esta crisis, y esperemos que sea lo antes posible, la carne será más difícil de conseguir y los precios serán más altos.

La administración Biden una vez más culpa a Rusia por este último ciberataque. Sea cierto o no, las relaciones entre Estados Unidos y Rusia seguirán deteriorándose rápidamente, y muchos están profundamente preocupados por el lugar al que nos llevará toda esta hostilidad.

Lamentablemente, esta nueva escasez de carne es solo la punta del iceberg. Hace unos días, el Drudge Report publicó un artículo con este impresionante titular: “Cómo se acabó todo el mundo”.

El siguiente es un breve extracto de ese artículo:

“En Conshohocken, Pensilvania, Jack Romano está literalmente esperando a que llegue su barco.

Es vicepresidente de ventas de Van Horn, Metz & Company, que compra productos químicos a proveedores de todo el mundo y los vende a fábricas que fabrican pintura, tinta y otros productos industriales.

En tiempos normales, la empresa se retrasa en el cumplimiento de quizás el 1% de los pedidos de sus clientes. En una mañana reciente, no pudo completar una décima parte de sus pedidos porque estaba esperando que llegaran suministros”.

Es posible que haya notado que los productos están cada vez más «agotados», y esta tendencia no desaparecerá en el futuro previsible.

Mientras tanto, la inflación amenaza con descontrolarse. En este punto, incluso los ejecutivos de Costco advierten públicamente que la inflación se ha convertido en un problema importante:

“No les diga a los ejecutivos de Costco que la inflación es baja.

La cadena de clubes grandes dijo que ha estado viendo precios acelerados en una gama de productos, incluidos contenedores de envío, papel de aluminio y un aumento del 20% en los precios de la carne durante el último mes.

“Abundan los factores inflacionarios”, dijo el jueves el director financiero Richard Galanti en la conferencia de resultados del tercer trimestre fiscal de la compañía”.

A raíz de esto, analistas e influencers advierten: “Si sabes que vas a necesitar algo en los próximos meses, cómpralo ahora, porque como van las cosas hay muchas posibilidades de que pagues mucho más si esperas”.

¿Ha notado que algunas empresas están tratando de ocultar la inflación reduciendo el tamaño de los paquetes? Este es un fenómeno que se conoce como «contracción».

“Los consumidores están pagando más por una gama cada vez mayor de productos básicos del hogar de formas que no aparecen en los recibos (rollos más delgados, bolsas más livianas, latas más pequeñas), ya que las empresas buscan compensar los crecientes costos de mano de obra y materiales sin asustar a los clientes.

Es una forma de camuflaje minorista conocida como «contracción», y los economistas y defensores de los consumidores que rastrean el empaque esperan que se vuelva más pronunciada a medida que aumenta la inflación, apoderándose de artículos cotidianos como toallas de papel, papas fritas y pañales”.

Muchas empresas ahora están haciendo esto, porque el costo de las materias primas se está disparando. Incluso Elon Musk se queja del aumento de los precios de las materias primas:

“Quizás finalmente dándose cuenta de que no puede generar ganancias vendiendo vehículos o tal vez realmente entre la espada y la pared de semiconductores, Tesla está aumentando los precios (y eliminando características) de sus vehículos.

El CEO Elon Musk se dirigió a Twitter a última hora del Día de los Caídos para explicar las alzas, culpándolas al conveniente chivo expiatorio de los problemas de la cadena de suministro”.

“Los precios aumentan debido a la presión de precios de la cadena de suministro en toda la industria. Especialmente las materias primas”, escribió Musk en un tuit a última hora del Día de los Caídos.

Lamentablemente, esto es solo el comienzo.

Los gobiernos de todo el mundo continúan pidiendo prestado y gastando dinero como si el mañana nunca llegara, y los bancos centrales mundiales continúan inyectando gigantescas montañas de dinero nuevo en sus respectivos sistemas financieros.

En este tipo de entorno, una «escultura invisible» que no es más que aire se puede vender literalmente por 18,000 dólares:

“Un artista italiano pudo vender su escultura invisible “inmaterial” – que técnicamente no existe (al menos en este plano) – por miles de euros.

Salvatore Garau, de 67 años, desafió los límites del arte contemporáneo aún más después de cobrar alrededor de 18,000 dólares por su trabajo titulado «Io sono» (Yo soy) en una subasta reciente, según Il Giorno el 21 de mayo”.

La pesadilla inflacionaria de la que muchos de nosotros hemos estado advirtiendo sin descanso está aquí, y seguirá empeorando.

Además, tengo la sensación de que se avecinan bastantes “sorpresas” importantes durante la segunda mitad de este año.

Lo preocupante de esto, es que las economías latinoamericanas sufrirán la debacle de los Estados Unidos al estar estrecha y económicamente ligados a este país. Y ya lo estamos viendo.

¿Debemos prepararnos? Trataremos de contestar esa pregunta en siguientes artículos.

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Redacción Anwo.life