El presidente Joe Biden emitió una amenaza para aquellos que elijan no vacunarse contra el coronavirus: “terminarán pagando el precio”, dijo.

Durante un discurso sobre la distribución de vacunas, Biden declaró: “Si los no vacunados se vacunan, se protegerán a sí mismos ya otras personas no vacunadas a su alrededor. Si no lo hacen, los estados con bajas tasas de vacunación pueden ver cómo aumentan las tasas de brotes y es posible que este progreso se revierta”.

Por supuesto, muchas personas no vacunadas se han recuperado del virus y, por lo tanto, son inmunes por naturaleza y eligen no tomar una vacuna que, por definición, es experimental.

No importa, esas personas son la amenaza, al menos para Biden.

Los últimos comentarios de Biden se producen después de que emitiera un ultimátum la semana pasada:

“Vacúnese o use una mascarilla hasta vacunarse”. “La decisión es tuya”.

Joe Biden ha sugerido que los estadounidenses que no tomen la vacuna contra el COVID-19 podrían verse obligados a usar máscaras indefinidamente.

La misiva directa siguió a un anuncio de los CDC de que los estadounidenses que habían recibido la vacuna podían quitarse las mascarillas en el interior.

Sin embargo, el aviso actualizado vino con una larga lista de exenciones. Las mascarillas seguirán siendo obligatorias en todos los medios de transporte público, en los aeropuertos, así como en las visitas al médico y al hospital, residencias de ancianos, cárceles y refugios para personas sin hogar.

No se sabe cómo los que han sido vacunados probarán que se han inyectado, ni cómo se llevará a cabo la aplicación de la mascarilla a los que no lo han hecho.

Al sermonear a los estadounidenses que no aceptan la vacuna y que el gobierno se verá obligado a enmascarar la gente durante meses o incluso años más, la administración Biden está creando con el discurso una segunda clase de ciudadanos, presumiblemente como un castigo para los “antivacunas”.

Biden pidió a los estadounidenses que traten a quienes eligen usar mascarillas “con amabilidad y respeto”, a pesar de que hay muchos más incidentes de gente gritando y acosando a las personas por no usar una mascarilla.

El levantamiento de los mandatos de las mascarillas para quienes se han puesto la vacuna, se produce después de semanas de quejas de que no había ningún incentivo para tomar la vacuna dado que no cambió nada para quienes la tenían.

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Y recuerda… “No asumas NADA, cuestiona TODO”.

Redacción Anwo.life