En un informe del 19 de diciembre de 2020 de Thomas Clark, MD, MPH, titulado “Anafilaxia después de la recepción de la vacuna de m-RNA COVID-19”, encontramos un gráfico muy interesante.

Según los CDC, al 18 de diciembre de 2020, 3,150 personas que fueron vacunadas contra COVID-19 se volvieron “incapaces de realizar sus actividades diarias normales”.

Vea el gráfico a continuación:

Específicamente, el gráfico dice:

Vigilancia activa V-safe para vacunas COVID-19

Eventos de impacto en la salud (incapacidad para realizar las actividades diarias normales, incapacidad para trabajar, atención requerida de un médico o profesional de la salud) 18 de diciembre (5:30 pm EST): 3,150.

3,150 de 112,807, es un porcentaje del 2.79% de personas que no pueden realizar sus actividades diarias normales después de haber sido vacunadas contra el COVID-19.

Nos seguimos preguntando… ¿es segura la vacuna contra el COVID 19?

10. El 97% de los pacientes identificados con COVID por PCR nunca han tenido COVID

Está confirmado: la pandemia es impulsada por las pruebas de PCR defectuosas, tal como lo afirmó el ex director científico de Pfizer, el Dr. Michael Yeadon, hace meses.

“Casi todas” las pruebas para Covid-19 están produciendo falsos positivos, advierte el Dr. Yeadon.

Así pues, 22 científicos de gran renombre concluyen que la prueba de PCR produce un 97% de falsos positivos. Entonces, de todos los pacientes de Covid que hemos visto, el 97% nunca tuvo Covid.

Puedes encontrar el estudio en inglés dando click aquí (https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6988269/) y aquí (https://cormandrostenreview.com/report/)

Así pues, una demanda europea ha solidificado el hecho de que la prueba de PCR ampliamente utilizada para detectar el coronavirus de Wuhan (Covid-19) no es confiable hasta en un 97%, por lo que básicamente es inútil.

Según los informes, los jueces portugueses confirmaron un fallo de un tribunal inferior que decía que poner en cuarentena por la fuerza a cuatro turistas alemanes después de que uno dio “positivo” por Covid-19 era ilegal porque la prueba de PCR es inherentemente fraudulenta.

Dictado el 11 de noviembre, el veredicto siguió a una apelación contra un recurso de hábeas corpus presentado por cuatro alemanes contra la Autoridad Sanitaria Regional de Azores, que exigía que se pusieran en cuarentena.

“Este organismo había estado apelando un fallo de un tribunal inferior que falló a favor de los turistas, quienes afirmaron que fueron confinados ilegalmente en un hotel sin su consentimiento”, escribe Peter Andrews para RT.

“Se ordenó a los turistas que se quedaran en el hotel durante el verano después de que uno de ellos dio positivo por coronavirus en una prueba de relaciones públicas; los otros tres fueron etiquetados como contactos cercanos y, por lo tanto, también fueron puestos en cuarentena”.

El Tribunal de Apelación de Lisboa determinó que la Autoridad Sanitaria Regional de Azores había violado el derecho tanto portugués como internacional al obligar a los cuatro turistas alemanes a permanecer confinados en un hotel, ya que solo un médico puede “diagnosticar” a alguien con una enfermedad. Los turistas tampoco fueron evaluados individualmente.

En su fallo de 34 páginas, el Tribunal de Apelación de Lisboa concluyó que:

“En vista de la evidencia científica actual, esta prueba se muestra incapaz de determinar más allá de toda duda razonable que tal positividad corresponde, de hecho, a la infección de una persona por el virus SARS-CoV-2”.

En otras palabras, a los ojos de la corte, una prueba de Covid-19 “positiva” no significa absolutamente nada y no corresponde a un “caso” real de Covid-19, sea lo que sea que se suponga que significa un “caso”.

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El fallo de la corte ofreció dos razones específicas por las que una prueba de PCR “positiva” no tiene sentido, la primera es que la confiabilidad de la prueba depende de la “cantidad de ciclos utilizados”. La segunda es que la confiabilidad de la prueba depende de la “carga viral presente”.

Estos dos factores hacen que la prueba sea cuestionable, en el mejor de los casos. En el peor de los casos, y esta es la realidad, la prueba de PCR no tiene ningún sentido ni valor, y no revela nada sobre nada en el contexto de la ciencia legítima.

Nadie parece saber cuántos “ciclos” son apropiados para determinar si un resultado “positivo” de una prueba es real o falso. Algunos países usan hasta 40 ciclos, mientras que otros usan alrededor de 25. Todos producen resultados variables.

Incluso Anthony Fauci admitió que las pruebas para Covid-19 tienen un “defecto fatal”. Fauci explica que la prueba es inútil cuando se ejecuta a 35 ciclos o más, pero la FDA recomienda ejecutar la prueba hasta 40 ciclos.

Para un virus novedoso que supuestamente es lo peor que le ha pasado al mundo desde la gripe española, el hecho de que se requiera tanto trabajo para tratar de averiguar si una persona está realmente “infectada” demuestra que esto es Difícilmente la amenaza que los medios de comunicación pretenden ser.

Ahora sabemos con certeza que no hay una “segunda ola”, a menos que, por supuesto, se cuente todo la alharaca y la histeria de los medios que pretenden que hay.

En la vida real, las personas no caen muertas en las calles, muchas unidades hospitalarias están a su capacidad normal o incluso están vacías, y la gente se pregunta: ¿Por qué sigo encerrado en mi casa con una máscara?

Es una pregunta válida, especialmente a medida que se publica cada vez más ciencia para mostrar que el mundo está siendo engañado por un virus que casi todas las personas que lo “contraen” superan.

En la gran mayoría de los “casos”, las personas ni siquiera muestran síntomas, lo que significa que nunca se enfermaron.

Mientras tanto, los principales medios de comunicación están ignorando el caso judicial de Portugal porque destruye la narrativa prevaleciente de Covid-19, que sostiene que todos debemos seguir viviendo con miedo, evitar ver a nuestros seres queridos y ver cómo la economía se desmorona en el olvido.

En conclusión, los cierres y todas las demás medidas opresivas están impulsados ​​por la ciencia basura, y los gobiernos lo saben. Entonces, ¿por qué lo hacen? ¿Acaso ésta es la prueba definitiva de que el Covid-19 fue planeado para marcar el comienzo del Nuevo Orden Mundial?